Cuando Billy
Wilkinson, de 15 años, desaparece en mitad de la noche, su madre, Claire, se
culpa a sí misma. No es la única en hacerlo. No hay un solo miembro de su
familia que no se sienta culpable, y los Wilkinson están tan acostumbrados a
guardar secretos entre ellos que la verdad no empieza a salir a la superficie
hasta seis meses después.
Claire está segura de
que sus amigos y su familia no tienen nada que ver con la desaparición. el
instinto de una madre nunca se equivoca... ¿O sí?
¿Cuántas familias resistirían la desaparición de un hijo sin
que se resquebrajaran sus cimientos? Ese es el planteamiento de
"Desaparecido", de C. L. Taylor, una novela que apuesta por ir más
allá del thriller puro y duro, del quién lo hizo y por qué, y pone el foco en
los entresijos del núcleo familiar, ése que a todos se nos antoja de hormigón
armado y que quizá, al final, no sea tan inquebrantable como pensamos.
Y es que transcurridos seis meses de la desaparición de
Billy, el pequeño de los Wilkinson, la vida insiste en volver a su cauce
habitual. Hay que retomar las obligaciones laborales, familiares, conyugales;
hay que continuar bregando porque los medios de comunicación, sometidos a la
última hora, no olviden al niño perdido. Y en medio de esa vorágine está
Claire, la madre, la piedra angular de cada casa.
La mayor virtud de "Desaparecido", como os digo,
es que sin abandonar la esencia del género, la del enigma sin resolver, sabe
ampliar sus horizontes y ahondar en sentimientos como la pérdida, la soledad o
la culpa. Especialmente en esta última. De forma inevitable, todos los que soportan la ausencia de Billy, se sienten al mismo tiempo responsables en parte.
Y gracias a la narración en primera persona, a través de la que C. L. Taylor da
voz a Claire, ahondamos especialmente en el rol de una madre que lucha ya no
sólo por recuperar a su hijo perdido, sino porque su familia no acabe de
desmoronarse.
"Me entran ganas de zarandear a mi yo de dieciocho años. Eso no
era miedo. Hasta que no tienes hijos no sabes lo que significa verdaderamente
el miedo."
La autora se esmera en construir unos personajes solventes,
seres con volumen, que dependiendo de cómo miremos, percibiremos con más o
menos sombras. Padres, hijos, hermanos con debilidades y miedos.
"Desaparecido" nos obliga a enfrentarnos también, a los que somos
padres, a la cada vez más difícil adolescencia, a la falta de conocimiento
acerca de nuestros propios hijos, al miedo de todo padre a que haya algo más
tras la actitud desafiante que muchas veces preferimos achacar a la edad. A
través de Claire, entendemos (o recordamos) que el miedo adquiere una nueva
dimensión cuando llegan los hijos, y que de nada sirve la sobreprotección, el
castigo o el miedo permanente.
Como veis, ha sido una lectura que he disfrutado, que se
sale un poquito de los raíles del thriller más convencional, y nos otorga una
novela más pausada de lo que esperaba y también más compleja, especialmente en
el plano emocional.
Hola!
ResponderEliminarA mí me gustó mucho, especialmente la narración en primera persona que te hace meterte de lleno en el personaje de Claire.
Un beso
La leeré en breve, de hecho me la he traído para leerla en vacaciones. Espero disfrutarla tanto como la habéis disfrutado los demás.
ResponderEliminarBesos
Está bastante bien y seguro que si me la cruzo la leeré. Me alegro de que la hayas disfrutado.
ResponderEliminarUn besazo
Me llama muchísimo sobre todo la portada, jajajja. Sí, me ha salido algo material pero hija, es que entra por los ojos. Luego el tema me echa para atrás. Tengo una beba de 20 meses y si le pasa algo muero. Así que estos temas me dejan echa polvo. Un beso
ResponderEliminarMe ha encantado la forma en la que has enfocado la reseña, pero tienes toda la razón...no es un simple thriller. Va más allá y nos acerca a la familia, a lo que se vive dentro de ella y a las inquietudes de los padres sobre sus hijos. Me gustó mucho también.
ResponderEliminarBesitos
Me la apunto, podría ser una buena lectura de verano, besotes
ResponderEliminarPor lo que nos cuentas en tu reseña, veo que es una novela que no deja indiferente a quien la lee. La leería. Tomo buena nota de ella. Besos.
ResponderEliminarEs una buena lectura, pero al narralo todo desde el perspectiva de su personaje principal quedan sesgados muchos matices de la historia. Besos
ResponderEliminarTambién la disfruté mucho. La autora consiguió que sufriera con Claire.
ResponderEliminarUn beso ;)
Qué bien que te haya gustado tanto. Yo también la voy a leer este mes
ResponderEliminarBesos
Ya le había echado el ojo a esta novela y lo que nos cuentas hace que me atraiga mucho más
ResponderEliminarBesos
A mí me gustó mucho, una lectura muy adictiva que se lee de una sentada a pesar de su ritmo pausado. Ese punto de vista diferente dentro del género le sienta muy bien.
ResponderEliminar¡Besote!
Yo la disfruté muchísimo, en este caso casi sería mejor decir que la sufrí porque me metí tanto tanto en la piel de la narradora...
ResponderEliminarBesos.
Me gusta cuando una novela sorprende y se nota en tu reseña que a ti te ha sorprendido gratamente. Los personajes solventes siempre dan buen resultado ya que son el motor de la historia y es una pieza imprescindible para el éxito de la misma.
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado. Intentaré colocarla en mi lista.
Besos, MaraJss
Hola, los libros de padres destrozados me mueven mucho y eso que no tengo hijos pero soy bastante sentimental, sin duda me encantaría leerlo aunque sufra.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu reseña.
Un abrazo desde La letra como alimento.
¡Hola! ^^
ResponderEliminarMe atrae mucho el argumento. El tema de las desapariciones de personas me resulta muy interesante en el cine, pero reconozco que no he leído muchos libros de esta temática. Este creo que me va a gustar mucho.
Besos!
Me gustó mucho también. Un punto de vista interesante desde dentro de la propia familia.
ResponderEliminarBs.
Lo tengo en casa desde que salió, pero aún no me he puesto con él, espero que me guste
ResponderEliminarBesos