La maldición de Hill House (The
Haunting of Hill House, 1959), considerada una de las
principales novelas de horror del siglo XX, narra el inquietante experimento de
John Montague, doctor en Filosofía y antropólogo, que lleva años entregado al
estudio de «las perturbaciones psíquicas» que suelen manifestarse en las «casas
encantadas». Infructuosamente ha buscado una casa idónea, cuando un día oye
hablar de Hill House, una mansión solitaria y de siniestra reputación. Montague
decide alquilarla y busca ayudantes dispuestos a pasar una temporada en ella:
Eleanor, una mujer desdichada que, tras once años cuidando a su arisca madre
inválida, se ha vuelto una persona solitaria; Theodora, joven alegre y curiosa,
seleccionada por su increíble capacidad telepática; y Luke, vividor y
mentiroso, incluido en el grupo por exigencia de la propietaria, su tía. El
objetivo: tomar notas de cualquier fenómeno paranormal que se presente para
documentar el libro sobre casas encantadas que prepara el doctor. Las alucinantes
experiencias que vivirán en la casa será mejor que el lector las descubra por
sí mismo.
La
novela que hoy os traigo es un clásico de la literatura gótica, y viene de la
mano de una autora que es referente en el género. De Shirley Jackson leí hace
unos meses la fantástica “Siempre hemos vivido en el castillo”, que os adelanto
ya que estará entre mis mejores lecturas de este año, y “La lotería”, uno de
sus relatos más conocidos. Me propuse, pues, ahondar un poco más en la figura
de una autora que ha servido de inspiración para los que han ido llegando al
género de terror después que ella. Y decidí hacerlo con su obra más
emblemática, “La maldición de Hill House”, que sin embargo, no me ha llenado
tanto como esperaba.
Quizá sea precisamente esa
inspiración que supuso Hill House
para las generaciones venideras lo mejor de la novela. Ha sido un auténtico
placer ir encontrando en ella instantes que después hemos visto en la
literatura del género (Stephen King es un devoto confeso de la autora) y también
en el cine, pues hay mucho de Jackson en el cine de Amenábar o Wan.
El otro elemento a destacar, el
más llamativo, es la magnífica ambientación de ésa casa encantada, parapetada
en lo alto de la colina, personificada hasta el extremo…
Era una casa vil. Con las palabras fluyendo libremente en su mente
experimentó un escalofrío y pensó, Hill House es vil, es una casa enferma;
márchate de aquí de inmediato.
Jackson juega con la
distribución, la verticalidad y la metáfora para dotar de vida a la mansión,
erigiéndose como arquitecta de un laberinto complejo, casi dotado de
inteligencia propia, capaz de ahondar en la psique de sus habitantes y
manipularles a su antojo. Y, sin embargo, deja la puerta abierta a la locura, a
que aquello sólo sea un invento de sus habitantes. Una visión que recuerda a lo
que hacía Henry James en su clásico “Otra
vuelta de tuerca”.
El silencio empujaba incansable contra la madera y la piedra de Hill
House, y lo que fuera que caminase allí dentro, caminaba solo.
No se le puede negar a la autora
el mimo con el que crea a sus personajes, el cuidado con el que perfila sus
personalidades. Se empeña en ahondar tanto en su psicología que, en ocasiones,
uno acaba un tanto saturado de tanto soliloquio, en especial en lo que se
refiere al personaje de Eleonor, que tengo que confesar que ha terminado
sacándome de quicio en más de una ocasión.
Mención aparte para el estilo
narrativo de Shirley Jackson, que exhibe una prosa barroca, con un vocabulario
riquísimo y abundancia de figuras literarias. Funciona en lo descriptivo pero
no tanto cuando sus personajes toman la voz, sobre todo en esos monólogos
internos que resultan a veces farragosos y reiterativos. Al margen de eso, me
ha llamado especialmente la atención el uso que hace de la cursiva para dar
énfasis a algunas expresiones, en ocasiones sólo palabras sueltas. Un recurso
sencillo que utiliza con tanto tino que consigue provocar la inquietud que
pretende en el lector. Tan efectivo que lo heredó el mismísimo Stephen King.
No tiene mala punta, no he leído nada de ka autora pero creo que me decidiría por Siempre hemos vivido en el castillo, he leido muy buenas opiniones de esa novela.
ResponderEliminarBesos
Me la llevo me parece muy atractiva.
ResponderEliminarLa literatura gótica no me gusta mucho y si encima el lenguaje utilizado es demasiado recargado...lo dejo pasar. Besos
ResponderEliminarEl terror me parece un género apasionante. Son libros que me llaman pero a la vez me cuesta porque soy muy cagueta. Con decirte que he leído El exorcista pero nunca he podido ver la película.... Soy muy impresionable, pero disfruto. Soy de las que lee con los pelos como escarpia, con las lágrimas en los ojos del miedo, mirando por encima del hombro pero disfrutando a tope de la experiencia.
ResponderEliminarPero esta no te la robo. No se porqué, no va con mi poco estilo terrorífico que tengo.
UN beso
Ya tengo en casa "Siempre hemos vivido en el castillo", tu entusiasta reseña me acabó de decidir, a ver si este verano me pongo con ella. Me gusta lo que comentas de esta novela, que fue inspiración para muchos autores y directores de cine posteriores. Eso es porque de verdad es un clásico. Y me gusta la promesa que nos haces sobre la estupenda prosa de la autora. Y me pone los pelos de punta la frase esa de "y lo que fuera que caminase allí dentro, caminaba solo". ¡Qué miedo en tan pocas palabras! Pero primero, leeré la del castillo, sobre todo si dices que esta se te ha quedado un pelín más floja. Bss
ResponderEliminarA mi a pesar de algunas cosas que comentas, no me importaría leerlo, aunque antes quiero hacerme con Siempre hemos vivido en el castillo. ¡Ya te contaré!
ResponderEliminarBesos
La verdad es que me apunté la de Siempre hemos vivido en el castillo. Este me llama la atención, me gustan las novelas góticas y un poco de terror psicológico pero si son muy raras pues como que no... por lo que comentas parece un poco light para los cánones actuales así igual me atreveré con ella.
ResponderEliminarun besazo
Aunque he leído alguna novela de este género, no soy muy dada a él, pero está claro que cuando un libro se convierte en clásico, le avalan otras características más allá del género. Lo que cuentas sobre el estilo de la autora me ha convencido más y, de vez en cuando, meter un poco de terror en nuestras vida puede ser de lo más positivo.
ResponderEliminarPor otro lado, la reseña es fantástica.
Un beso.
Pues a pesar de todo me gusta, me lo llevo.
ResponderEliminarBesos.
No la he leído aún y mira que lleva tiempo entre mis pendientes. Tus peros me sirven para bajar mis expectativas, por si acaso.
ResponderEliminarBesotes!!!
Es una autora de la que no he leído nada, aunque sí que tengo los otros dos títulos, que comentas, anotados para leer pronto. Y este a pesar de que me tienta muchísimo, quizás lo deje para después de los otros...que ya veo que no ha llegado al nivel de lo que ya habías leído de ella.
ResponderEliminarBesitos
Interesante!!
ResponderEliminarMe suelen gustar los libros de intriga paranormal... De hecho, no sé donde vi o leí, que hay una disciplina o ciencia (no recuerdo bien) que explica como las casas antiguas y que han sido habitadas durante generaciones y todo lo que ha ocurrido en ellas, les va dando "vida" y cómo esa "vida" se puede percibir...
;)
No termina de convencerme el género. La dejaré pasar esta vez.
ResponderEliminarUn beso ;)
Pues el género me gusta, aunque este título en concreto me hace dudar. Lo apunto, pero con mis dudas. Un besote!
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarMe gusta mucho este género, y la verdad es que el libro me ha llamado bastante la atención. Muchísimas gracias por tu reseña, me lo apunto.
Un beso, nos leemos <3
Me la llevó, me encantan las mansiones oscuras, la literatura gótica y el terror y no conocía a la autora... Besinos.
ResponderEliminarNo me termino de ver con esta historia. Hoy no me lo llevo.
ResponderEliminarBesos
Como te comentaba, cuando la leí me decepcionó un poco, como a ti se me hizo lenta, acabé un poco cansada de Eleonor y como tenía la idea de que era de terror, la decepción fue mayor. La verdad es que prefiero la película.
ResponderEliminarUn beso ;-)