“Una tienda en París” ha
supuesto mi tercer encuentro literario con su autor, Màxim Huerta. Uno de ésos
escritores a los que se siempre tendemos a mirar bajo el cristal de los
prejuicios y que, sin embargo, me conquistó desde las primeras líneas de “La noche
soñada” y que consiguió volver a hacerlo con “El susurro de la caracola”. Os
adelanto ya que también ha sido muy agradable la lectura de esta novela, con
sus dos hilos temporales y sus marcados contrastes.
Porque “Una tienda en
París” es ante todo eso, una historia de contrastes. Del luminoso y jovial
París de los años 20 al Madrid a veces gris de nuestros días; del exuberante
universo de Modigliani, con su botella de ron y sus bellas mujeres, a la
existencia gris de una hija sin madre. De la aparentemente luminosa Alice
Humbert a la Teresa que no encuentra el color con el que pintar su vida. Y
cubriendo sus historias como una pátina flota la idea del destino y sus
señales, el cómo serían nuestras vidas si supiéramos leer e interpretar las
pequeñas pistas que nos va poniendo sobre la mesa.
Con un tono pausado,
común a todas las novelas del autor, no estamos ante una trama de las que se
leen con fruición ni necesidad. Narrada en dos líneas temporales que se irán
alternando y entrelazando continuamente, Màxim Huerta construye dos personajes
que habrán de sostener su historia. Conoceremos primero a Teresa, criada por
una tía estricta hasta la náusea que ha convertido su vida en un rígido fluir
de días en los que no pasa nada. Para evadirse, Teresa pinta. Lo hace en blanco
y negro, abusando del difuminado para disimular errores, incapaz de romper el
lienzo y empezar de nuevo. Hasta que un día, al pasar frente a un anticuario,
un cartel de madera escrito en francés captará su atención: Aux tissus des Vosges, Alice Humbert.
Nouveautés. A partir de este instante, Teresa se atreverá por fin a dar un
paso adelante y trasladarse a París siguiendo las señales de ése hipotético destino
que parece aguardarla. Allí se adentrará en la historia de Alice, el otro
sostén de la historia. Un personaje que guarda mucho en común con Teresa, pero
del que no os revelaré nada más. Junto a ella desfilarán personajes reales y
ficticios que conviven con acierto.
Si hay algo realmente
delicioso en esta novela es la prosa, delicadamente emotiva, de su autor. Màxim
Huerta sabe hallar la emoción en los objetos cotidianos, en lo corriente. Su
escritura fluye con sencillez pero cargada de una intensa belleza, dejando a su
paso un reguero de frases de ésas que se subrayan y se releen, de las que te
sacan una lágrima imprevista. No me malentendáis, no esperéis encontrar almíbar
entre sus letras. Todo lo contrario.
Necesario es también
destacar la importancia, de nuevo, de la figura materna. Un tema recurrente en
todas sus novelas que, sin embargo, tiene un cariz distinto en cada una de
ellas. Si en “La noche soñada” era una figura presente, corpórea, aquí ocurre
que aparece de forma más discreta, elevándose sobre la historia sólo al
principio y al final de ésta. Reconozco que esta parte ha conseguido
emocionarme hasta la médula. ¿Os veis capaces de llorar por culpa de un
delantal colgado de un clavo? Probad.
Todavía no he leído nada de este autor pero esta novela me apetece mucho sobre todo por la parte ambientada en los años 20 que me atrae un montón
ResponderEliminarBesos
No fui capaz de terminar "La noche soñada". Pero me gusta Modigliani... Así que no la descarto.
ResponderEliminarsaludos
Compré hace poco "El susurro de la caracola" animada por tu anterior reseña y anoto este en mi lista de deseos...
ResponderEliminarBesos
No he leído nada del autor, pero la verdad es que no me tienta nada...
ResponderEliminarBesos!
¡Hola!
ResponderEliminarMe sonaba la portada pero no me había puesto a leer de que iba.
Tiene buena pinta, seguramente me ponga con el.
Un beso y gracias por la información.
Pues tienes toda la razón, es unn autor cuyo nombre nos predispone y por eso tendemos a descartarlo. Pero desde que vi que lo recomendabas, tengo apuntadita "La noche soñada" para subsanar prejuicios, ya te contaré. Bss
ResponderEliminarHola^^
ResponderEliminarMe apetece mucho leer algo del autor, pero no tengo claro por cuál de sus libros comenaré, quizás me decante por este.
besos!
Esta fue mi primera novela y me cautivo. Max tiene algo que hace emocionar... no sabría decirte. Pude conocerle en la feria del libro el año pasado y tiene algo que engancha... ;)
ResponderEliminarBesos
He oído buenas críticas respecto a los libros de este autor, tal vez le de una oportunidad más adelante. Lo que pasa es que no sé por qué pero siempre tengo prejuicios ante los libros de presentadores o gente que sale en la tele. Besos.
ResponderEliminarTengo muchas muchas ganas de leer este libro la verdad....espero poder ponerme con el pronto!
ResponderEliminarUn beso!
Supongo que es un autor con el que terminaré animándome en alguna ocasión, porque he visto varias opiniones en las que su prosa sale bastante bien parada. Pero no sé, supongo que no soy inmune a los prejuicios y, no sé, no termino de verme del todo entre sus letras, de momento.
ResponderEliminarBesines! :)
Hola, a mi también me gustó. Fue mi primera de novela del autor y he leído otras dos. Máxim tiene una prosa de lectura pausada, pero delicada, profunda y emotiva que cautiva. Besos
ResponderEliminarNo me he estrenado aún con este autor y mira que me apetece, que estoy viendo muchas reseñas positivas. No me importaría estrenarme con este libro, que creo que podría gustarme mucho.
ResponderEliminarBesotes!!!
Creo que voy a tener que empezar las reseñas de libros sobre este autor como tú. Al principio tuve mis grandes dudas de que fuese a encontrar un buen libro y la verdad es que me he enamorado con cada palabra de "Una noche soñada" y espero pronto leer el resto de libros del autor. Un saludo :D
ResponderEliminarYo sigo sin librarme de mis prejuicios y admito que tampoco pongo mucho interés en ello porque teniendo tanto pendiente me da más pereza aún.
ResponderEliminarBesos.
La verdad es que no suelo leer libros de gente que sale en la tele, pero suena muy bien. Por cierto, me gusta mucho tu blog así que me quedo por aquí. Un saludo.
ResponderEliminarVaya que sí soy capaz de llorar ante ese delantal, jaja Y sin ver el delantal y todo, sólo pensando donde estaba colgado. Coincido contigo en tus impresiones; debemos ser las dos igual de "pavas", jaja pero Maxim consigue llegarme al alma con su manera de escribir. Me gusta saber que aún tengo pendiente El susurro de la caracola.
ResponderEliminarBs.
No me termino de animar, no la descarto pero ya veremos.
ResponderEliminarBesos.
Aunque en principio su autoría me echaría para atrás, me han hablado tan bien de este libro que voy a tener que echarle un vistazo a esta novela... 1beso!
ResponderEliminarNo me acaba de convencer el autor. Quizá le acabe dando la oportunidad pero de momento lo dejo pasar.
ResponderEliminar·Estamos completamente de acuerdo. Lo realmente bonito es la manera de escribir... Que cantidad de frases señaladas y que sensaciones ... Remueve
ResponderEliminarBesos
Tengo pendiente al autor =)
ResponderEliminarBesotes